Tu Sueño Eterno (IV)


De nuevo, otra vez,
lo hallé, lo encontré,
está dentro de mí.

Este momento eterno,
está presente,
ni antes, ni después.
Sólo ahora, aquí.

Siento mi mente hueca,
y aún cuando continúe,
pensando,
sabré que no hay nada allí,
porque todo está aquí.

Si miro al cielo,
y te envidio,
porque vuelas,
no voy a echar a volar.

Sin ti, ahora,
soy lo mismo que antes,
antes de conocerte,
antes de que nacieses,
antes de que yo existiese.

Y sin un origen,
¿cómo crees que estás aquí?

Antes de que me preguntes,
por el antes de este origen,
te preguntaré yo a ti:
¿Por qué sitúas al origen,
en el primer lugar en el tiempo?
Cuando el origen,
está presente ahora, aquí.
Está dentro de ti.
Formas parte de él.

No lo comprenderás, ¡siéntelo!
Quizás no puedas sentirlo,
porque te obligue a ello...

Pero, no.
No voy a esperar aquí sentado,
a que lo sientas.
Voy a ser feliz,
mientras.
No un instante,
y olvidarme hasta el próximo.
Voy a intentarlo por ti,
ser feliz,
eternamente,
por cada instante,
por ti.

Tu sueño eterno,
es ahora, el momento,
en el que has despertado,
cuando has cambiado,
en tu loca aventura,
el estar despierto,
en la noche,
para soñar,
durante todo el día.

¡Y gozo de alegría,
cuando lloro, rio, y te odio,
todo al mismo tiempo!

Ertheliön

- ¡¡¡Drähke!!! ¡¡¡Por los mil demonios de Sepheröm, agárrate fuerte a mi!!!
- ¡¡¡Drähkeee!!! ¡¡¡Tu mano está resbalando!!! ¿¡Dónde está tu dios!? ¡El dios que llevas dentro, sácalo Drähke!
  Drähke en un impulso divino, alzó su brazo derecho, que pendía pegado a su cuerpo. Sin embargo, la reacción fue tan rápida que no pude hacer nada por frenar la fuerza que nos arrastró a ambos al fondo del desfiladero. No pude evitarlo y caímos como dos titanes impactando estrepitosamente contra el fondo de un abismo desértico.

No sé cuánto tiempo estuvimos ahí, caídos, como ángeles negros, de un cielo gris. Conforme fui despertando, oí una melodía. Cada vez sonaba más cristalina, suave y a la vez punzante. Unas voces se fusionaban con la música, decían:

 "We are hearing the voices,
the voices in their heads.
Don't let the iron cry for you,
or you will be lost.

She is the Goddess of Ertheliön,
Vergëlish Daemëriahm ,
follow her, please.
To the other side,
you've got one way.
The choice is... Jöuhll...

We are the gods,
we are the humans.
We are the gods,
we are, the human race."

- Drähke, despierta, ¿no oyes esa melodía? ¿La reconoces?
Drähke no respondió. Drähke no despertó. Aun seguía respirando. El camino a Ertheliön por el desfiladero no sería tan complicado como por la superficie. Ni siquiera tendríamos que escalar. El camino se iba elevando hasta la superficie. La pendiente tenía la inclinación perfecta aunque  la distancia fuese más bien considerable. En aquella zona, muy desértica, era poco probable que nos sorprendiesen las bletheräks y su lluvia de hannghüs. Drähke es ligero, podría cargarlo a hombros mientras no despertase. Nuestra elección fue seguir a la diosa de Ertheliön, como las voces de la melodía nos rogaban susurrando.  Esperando que esta decisión fuese la correcta, comencé a cargar a Drähke sobre mis hombros. El largo camino se convertía en un regalo de los dioses, mientras ese fuese el único obstáculo que halláramos en nuestro periplo hasta Ertheliön.  Vergëlish Daemëriahm, por tu senda, guíanos. Comenzamos a andar...

Super 8

Puro reflejo de la niñez de un creativo e infante Spielberg, Super 8 nos muestra cuán ida está la mente de la humanidad. Atrás quedó la hospitalidad que se le ofrecía a un foráneo. Mejor lo destripamos y le sacamos las entrañas a un ser que sólo quiere regresar a casa, por el mismo camino de donde vino. Y claro está, que se cabrea. ET 2, perdón, Super 8, en versión un poco más adulta, pero lo mismo en resumidas cuentas, es una vuelta de tuerca más, una apología a los valores del respeto y la igualdad, no ya sólo entre humanos, sino entre cualesquiera de las almas que puedan pulular por éste universo.

Parece que Vietnam sigue atormentando a los directores de cine estadounidenses, esta vez son niños, pero lo importante es el mensaje. Sin embargo, creo que ya somos conscientes de que continúan sufriendo por aquel apocalipsis del pasado. Quizás es el momento ya de darnos cuenta de que no hay enemigo extraterrestre, sino más bien uno llamado interrestre (el termino intraterrestre ya se aplica a una posible civilización muy avanzada evolutivamente, que coexistiría con la especie humana en el interior de nuestro mundo). En el Area 51 deben de conocer muy bien esta idea, puede que por ello les crezcan tanto los enanos por allí.

Salta a la vista, que el ET de Spielberg era más tierno, aunque este alien sigue siendo tan feo, si no más que él. Como lo cabrean, es perfectamente entendible. Las Super8, las maquetas, los niños cuya creatividad está a flor de piel, y los cubos de rubik grises voladores, son buenos valores añadidos. Lo que verdaderamente importa, también. Que seamos buenos, que no toquemos dónde no debemos, y que si el prójimo parece saber más que nosotros, no lo colguemos de una soga por ello. Y cuando llegue a casa, seguro que descansa, de todos nosotros.

Imagen: http://www.imdb.com/