Aquella mañana, que un ángel caído se posó en tu pecho,
apartaste, dulcemente, su pose de tu alma...
e impulsado por una hazaña,
aleteando se fue.
Y fue el diablo, ¿algo tan bello?
Mas dias después, en la noche,
fue un ángel tan lúcido, quien entró en tu alma,
y se posó en tí, ¿te indicaba algo?..
Y esta vez, guiaste a este pulcro ser,
hacía su libre naturaleza.
Se fue al son de tu suave susurro...
Y fue acaso ese dios, ¿algo tan poderoso?
"... y te convertiste en el hombre, y despertaste,
de tu sueño eterno..."